
Muñeco Labubu: La colección de juguetes que está robando corazones
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“5 Ideas Inspiradoras para Personalizar tu Muñeca Labubu y Hacerlas Exclusivas”
July 18, 2025¿Has estado viendo esa encantadora muñeca con la cara traviesa y orejas puntiagudas en Instagram o TikTok? Sí, ese es Labubu, el personaje que capta la atención de los coleccionistas de muñecas y los entusiastas de las colecciones.
Pero, ¿qué pasa si quiero comenzar con mi propio Labubu? Lo desglosaremos paso a paso.
¿Por qué todo el mundo habla de Labubu?
Labubu, que proviene de Asia, no es solo una tendencia pasajera. Con sus notables nuevos diseños y la fusión de dulzura y rareza en sus características, se ha convertido en un favorito del diseño, el arte pop y los coleccionistas de juguetes.
Cada adquisición es una aventura en sí misma porque vienen en cajas sorpresa. ¿Te llegará El Labubu pirata, El ninja o la edición dorada?
Sugerencias para comenzar sin frustraciones
Establece un presupuesto por mes.
Labubu puede convertirse rápidamente en una obsesión. Algunas ediciones cuestan solo 10a10a15, pero las raras pueden llegar hasta $200 en reventa. Determina cuánto vas a invertir antes de comenzar.
Considera empezar con opciones económicas.
Tener la pieza más extraña en el primer día no es una necesidad. Las series primarias son hermosas, más fáciles de encontrar y geniales para comenzar a construir tu exhibición.
No te sientas mal si el que obtienes no coincide con el que tenías en mente. ¡Cambia! Muchos coleccionistas están dispuestos a intercambiar. Esta es parte de la diversión y el pasatiempo de coleccionar.
Bonificación: Cómo proteger tus figuras El Labubu
No expongas a la luz solar: puede desvanecerse, el color del plástico puede cambiar.
Usa un paño suave para limpiar.
Mantén cerrados los armarios o vitrinas para proteger del polvo.
Para concluir, Labubu sigue siendo más que una figura: sirve como un acceso a un mundo creativo, artístico y, sorprendentemente, lleno de emociones. Cada figura, ya sea una colección de uno o cien, tiene su propia narrativa. Por eso, si sientes el llamado de Labubu, piénsalo dos veces pero no lo pienses mucho.